Los funcionarios de la ciudad de Mississauga están cancelando sus fuegos artificiales de Nochevieja en medio de preocupaciones sobre un aumento en los casos de COVID-19 impulsados por la variante ómicron altamente transmisible.
El comisionado de servicios comunitarios de la ciudad dice que la decisión de cancelar las celebraciones de fin de año fue difícil pero necesaria para mantener seguros a los residentes.
Jodi Robillos sostuvo que Mississauga hizo planes para realizar eventos en persona en la víspera de Año Nuevo cuando la propagación del COVID-19 estuviera bajo control.
Ella agregó que el creciente recuento de casos de COVID-19 significa que no es el momento adecuado para organizar eventos que pueden atraer grandes multitudes.
La ciudad seguirá permitiendo la pista de patinaje y los food trucks en su plaza de celebración hasta las 11 de la noche.
Se alentará a los residentes a que abandonen la plaza después de las 11 de la noche para celebrar en casa.
