El gobierno federal anunció una inversión de $200 millones para ayudar a una empresa con sede en Mississauga, Ontario, a construir una planta que pueda producir millones de vacunas de ARNm.
El ministro de Innovación, François-Philippe Champagne, explicó que el dinero se utilizará para expandir un sitio existente propiedad de Resilience Biotechnologies Inc. para proporcionar «soluciones hechas en Canadá, como vacunas y tratamientos para futuras pandemias».
Los fondos ampliarán la capacidad de fabricación y llenado de Resilience para una serie de vacunas y terapias, incluidas las inyecciones de ARNm como las que ahora se utilizan para combatir el COVID-19, agregó Champagne.
El gobierno afirmó que la expansión de la planta creará 500 empleos permanentes y 50 colocaciones cooperativas para estudiantes una vez que se complete la construcción en 2024.
La adición de unos 55.000 pies cuadrados de espacio de fábrica permitirá a Resilience fabricar entre 112 millones y 640 millones de dosis de producto de ARNm cada año. El objetivo es dejar a Canadá menos dependiente de los fabricantes de vacunas extranjeros cuando llegue la próxima pandemia.
Resilience es una organización de fabricación y desarrollo por contrato (CDMO), lo que significa que ensambla productos desarrollados por otras empresas.
Es estándar que las grandes compañías farmacéuticas como AstraZeneca, Merck y Pfizer subcontraten el proceso de fabricación de medicamentos a terceros. Algunas empresas han vendido sus plantas de fabricación para centrarse en la investigación y el desarrollo. Una planta propiedad de Novartis en Boucherville, Que. se vendió a Avara, una operación de fabricación por contrato, en 2018.
Actualmente, no existe una CDMO en Canadá que sea capaz de producir un suministro de vacunas suficiente para satisfacer las demandas nacionales e internacionales.
Champagne confestó que la inversión federal está diseñada para revertir «cuatro décadas de declive» en el sector de biofabricación del país.
Una vez a la vanguardia del desarrollo mundial de vacunas, el sector de las ciencias de la vida de Canadá se ha vaciado después de años de inversiones insignificantes tanto por parte de los gobiernos como del sector privado.
Champagne manifestó que Canadá tuvo problemas para atraer a cualquiera de los grandes jugadores de vacunas a Canadá en los primeros días de esta pandemia porque había muy poca capacidad de llenado y acabado disponible aquí para producir inyecciones en masa. (Finalizar y llenar se refiere al proceso de llenar los viales con la vacuna y finalizar el proceso de empaquetar el producto para su distribución).
«Yo diría que esto es un cambio de juego porque con eso, podremos apoyar a varios candidatos a vacunas», dijo Champagne. «Hemos estado buscando para traer todo de regreso a Canadá».
