La salud del presidente de Estados Unidos, Donald Trump , es «excelente» y no hay indicios de que sufra problemas cognitivos, dijo ayer el médico de la Casa Blanca.
«Todos los datos indican que el presidente está saludable y que lo seguirá estando mientras dure su presidencia», dijo el doctor Ronny Jackson en una conferencia de prensa después de la revisión de la semana pasada, que determinó que el jefe de la Casa Blanca, de 71 años, tiene una salud «excelente» y «no hay indicio de que tenga ningún tipo de problema cognitivo».
Jackson destacó especialmente la «excelente» salud cardíaca de Trump y también elogió su vista. Además, describió a Trump como alguien mentalmente «agudo e intacto», a pesar de que el presidente acostumbra dormir apenas poco más de cinco horas por noche.
Sin embargo, durante su conferencia de prensa, el médico de la Casa Blanca reveló que había alentado a Trump a realizar más ejercicio físico y reducir su consumo de alimentos grasos.
El presidente mide 1,88 metros, pesa actualmente 108 kilos -1,36 kilos más que en septiembre de 2016-, su presión arterial es normal, 122-74, y su colesterol total es de 223, algo más alto que lo recomendado.
El informe médico, muy esperado, se produjo después de que el líder estadounidense realizó un examen general de salud el viernes pasado. Trump insistió en incluir un examen cognitivo luego de que los líderes de la oposición expresaron preocupación por su salud psicológica.
Las dudas sobre el estado mental de Trump tomaron mayor relevancia desde la reciente publicación del polémico libro Fuego y furia, del periodista Michael Wollf, en el que se describe al mandatario como una personalidad infantil, incapaz de prestar atención a los informes, megalómano y víctima de sus impulsos.
El propio Trump salió a defenderse de esas acusaciones la semana pasada con un llamativo tuit. «Yo pasé de ser un muy exitoso empresario a una gran estrella de televisión y a presidente de Estados Unidos. Creo que esto se calificaría no como inteligente, sino como genio», escribió en Twitter.
Otro aspecto que elogió ayer Jackson sobre el estilo de vida del presidente fue su abstención del consumo de bebidas y drogas, y dijo que los beneficios eran evidentes en los resultados de los exámenes.
El profesional basó sus conclusiones tanto en información clínica y resultados de análisis como en el año de monitoreo de la salud del presidente.
Trump asumió el cargo a los 70 años y siete meses, convirtiéndose así en el presidente entrante de mayor edad en los Estados Unidos. Ronald Reagan había asumido en 1981 a los 69 años y once meses.
