Tradicionalmente las Cumbres de las Américas son reuniones de las Cabezas de Estado y Jefes de Gobierno de los Estados miembros del Hemisferio Occidental. Estas reuniones se llevan a cabo cada tres años con el propósito de discutir asuntos de política común, reafirmar valores compartidos, movilizar ambiciones comerciales, industriales, tecnológicas y ambientales y comprometerse con acciones específicas a niveles regionales, con el propósito de fortalecer la Democracia y la Gobernabilidad de los Estados miembros, ayudar a reducir la pobreza y la inequidad y aumentar las oportunidades para el progreso y el desarrollo.
Recordemos que la Sexta Cumbre de las Américas se celebró en Cartagena de Indias, Colombia, en 2012
En 2015 la Séptima Cumbre de las Américas se celebrará los días 10 y 11 de Abril en Ciudad de Panamá y tiene como Tema central la Prosperidad con Equidad: El Reto de la Cooperación en las Américas.
Varios temas de crucial importancia serán el motivo de las diferentes mesas de la cumbre. Temas como la Seguridad Regional, Recursos Energéticos, Salud, Educación, Migraciones, gobernabilidad democrática y participación ciudadana serán motivo de extenso análisis y ofrecerán una clara oportunidad para que los países de nuevo traten de definir conjuntamente una agenda hemisférica del más alto nivel.
Como resultado de la Cumbre de 2012, se le confió a la Organización de Estados Americanos el estudio de la problemática de las drogas en América, con análisis de sus impactos en las áreas de la salud, la Seguridad y la estabilidad de las Instituciones. Se creó la Iniciativa de Conectar a las Américas para el 2022.
Connect 2022 buscó ayudar entre otras muchas iniciativas claves, a generar un ambiente de negocios que permita el desarrollo de recursos energéticos renovables, buscar inversiones privadas atractivas y desarrollar la más moderna ingeniería al alcance de todas las Comunidades de América.
Pues bien, para 2015 la Vicepresidenta de Panamá invitó a Raúl Castro a la cita de la OEA. Cuba ha estado excluida de esta organización desde comienzos de 1994.
Los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, se encontrarán en la Cumbre de las Américas, en un hecho sin precedentes desde que La Habana, por presión de Washington, fuera suspendida en 1962 de la Organización de Estados Americanos (OEA) en razón de su sistema político marxista-leninista.
Si bien el encuentro de Castro y Obama se podría ver como un rayo de esperanza para la reanudación de un espíritu de negociación, concordia y mutuo entendimiento, recordemos que Los nexos cubano-panameños quedaron congelados a partir de julio de 2013. Un contrabando de armas enviado por Cuba a Corea del Norte y descubierto ese mes por Panamá en un buque norcoreano en aguas panameñas sobre el mar Caribe, desbarató lo que los jerarcas de la cancillería del país centroamericano de ese entonces describieron como “el momento” en que Washington intentaba ser conciliador con La Habana.
El Secretario de Estado de los Estados Unidos, John Kerry declaró que “estamos deseando que llegue la Cumbre de las Américas, que será un importante momento de liderazgo para Panamá, y esperamos que en esa cumbre podamos abordar todos los asuntos en materia de seguridad que nos preocupan a los dos países, pero también aquellos relativos a los derechos humanos y la democracia”.
En esta cumbre el encuentro entre Obama y Castro no será tan importante como el encuentro entre el mandatario estadounidense y el presidente venezolano Nicolás Maduro luego de lo acontecido en las últimas semanas cuando Obama declaro al gobierno venezolano como una amenaza para los estados unidos y sancionara a 56 altos funcionarios venezolanos en estados Unidos a lo que maduro respondió llamando a sus reservas y recogiendo millones de firmas en rechazo a estas medidas.
Por su parte Canadá llega a la cumbre de las Américas con un aumento en el comercio bilateral con varios países del hemisferio pero con unas relaciones políticas muy frías con los principales países de la región.
El principal inconveniente lo vive con México, uno de los principales socios comerciales de Canadá: la exigencia de visado de entrada en el país a los ciudadanos mexicanos impuesta inesperadamente en 2009 por el gobierno de Harper tiene incomodo al gobierno y a los empresarios mexicanos.
Otro de los países con los cuales Canadá mantiene relaciones tirantes es con el otro motor económico de la región, Brasil, tras las revelaciones en 2013 de que Ottawa espió al Ministerio de Minas y Energía de Brasil.
En Colombia y Perú varias ONG han hecho público el rechazo a las compañías canadienses de exploración de Petróleo y Oro por destruir el medio ambiente.
La cumbre de las Américas puede ser una gran oportunidad para que Canadá a través de su nuevo ministro de relaciones exteriores mejores las relaciones políticas con los países de la región dañadas entre otras razone por su cerrada oposición a que Cuba forme parte de las Cumbres de las Américas, una postura que el Gobierno de EE.UU. también mantenía hasta que dio un giro de 180 grados y el pasado diciembre cuando anunció un cambio de sus relaciones con La Habana.
